¿ESCOGES LO QUE PIENSAS?

¿ESCOGES LO QUE PIENSAS?.

Realmente, la espiral es imperceptible.. Comienza con recordar esa situación, esa conversación, ese desprecio.Dolerse. Pensar en - tal vez- el tono de las palabras, lo pesado de la ofensa, la fuerte falta en contra nuestra, y de ahí en adelante, si no estamos alerta, nos instalamos en pozo oscuro de las emociones lastimadas, por meses, por años.

"Ella me dijo..". "Yo creo". "Supongo que está feliz con esto". "El no se esfuerza." "Yo siempre intento."..... una larga lista de frases que acusan a todo y todos, y nos sitúan en el complicado y lastimoso papel de víctima irremediable.

Pero todo comienza con un pensamiento.
Con una mente acostumbrada a vagar sin rumbo, a subir y bajar de ánimo según está la vida, una mente sin disciplina , una mente sin Cristo.
Se nos olvida que el Espiritu Santo que habita en nosotros nos capacita para elegir. Somos libres para elegir. Y nuestra elección, como mujeres cristianas, siempre debe ser obedecer lo que establece Su palabra:

"Y ahora, amados hermanos, una cosa más para terminar. Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza. "
Filipenses 4:8 NTV

Lo escribió Pablo hace casi dos siglos. Y como la Palabra de Dios es viva, actual, encaja perfecto para nuestra loca vida moderna. ¿Y si lo aplicamos? Deja que la palabra de Dios cambie tus pensameintos, y tu vida.¿Y si tomamos la receta de Dios para esas largas semanas de pleito con el esposo, y en lugar de seguir hallando más defectos de los que tiene, pensamos en lo que nos enamoró de él? ¿ Y, si en lugar de repetir vez tras vez la ofensa de tu amiga, de tu jefe, de tu hermano, piensas en sus cualidades (que seguramente tiene, aunque no lo veas ahora) ¿Y si en lugar de hacer un recuento de las veces que te ha fallado tu padre, o tu madre, o tu hijo.... piensas en las que Dios te llama a ponerte a cuentas con ellos?

Si obedeciéramos al Espiritu Santo - sí, esa voz que te reclama cuando haces algo que no agrada a Dios- podríamos tener en control nuestra mente, antes de que se le ocurra hacer lo que estamos pensando. El mandamiento , es sencillo:

"Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres" Romanos 12:18 RVR1960

¿Depende de tí perdonar? Sí. En la cruz, todos fuimos perdonados.

¿Depende de tí dejar atrás el pecado cometido en tu contra y confiar en que Dios juzga todo y mira todo? Sí. Dios no se olvida de nada.. ni de nadie. Dios hace perfectamente Su trabajo: hagamos el nuestro.

Y Su propósito en nosotros, es hacernos cada vez más semejantes a Su Hijo: mente cristiana, carácter cristiano. Y cristiana viene.. de Cristo.

"Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne;. porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,." 2 Corintios 10:5a

No estamos solas en estas batallas espirituales y mentales. Es con Jesús y en Él que podemos pensar diferente:

" derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo," 2 Corintios 10:5b

Todo pensamiento rendido a Jesús. Las faltas, el pecado, cubierto por Su amor. Mi egoísmo limitado por Su gracia. Mis derechos, acotado por Su obediencia. Todo pensamiento inspirado por Su ejemplo. Es por Él que mi mente puede descansar del caos que inventamos - y al cual ya me acostumbramos- , para recordar toda yo fui hecha para Su alabanza. Para Su gloria.

Y mi mente no es la excepción.... ¿Lo intentamos? Dejemos de concentrarnos tanto en nosotros, y fijémonos en la cruz. Concentrémonos en Cristo. Ahí se renueva nuestra mente.

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