Publicaciones recientes

domingo, 22 de mayo de 2016

¿CAMINANDO CON MI EGOÍSMO?


Paso mucho tiempo en mi cocina. Su ventana mira a la calle y por ahí, desde temprano, veo pasar a varios vecinos deportistas. Desde hace algunas semanas he podido ver, mientras lavo trastes o preparo la comida, a una pareja de madre e hija. La mamá avanza con paso decidido, firme y rápido, casi apresurada.. y unos 5 o 6 metros atrás, le sigue una jovencita que no tiene el mismo ritmo de su madre, y por lo tanto, se atrasa.
No sé por qué, pero nunca las he visto al mismo paso. Nunca he visto a la mamá detenerse, esperar a su hija. Animarla, quizá.
Y como siempre, me quedo pensando... ¿a quién estoy dejado atrás? ¿estoy siendo compañera de camino? ¿me importa más mantener mi paso que ayudar a otros a encontrar su ritmo?
Mi vida ,como la de todos, está llena de cosas por hacer. Compromisos programados, pero mucha cosa inesperada que me hace cambiar de planes según se necesite.
Y eso me molesta. Me averguenza decirlo, pero no siempre me encanta ceder mi tiempo, mis planes, mi descanso en favor de otros. Yo quiero seguir con lo mío. Voy primero. Los demás síganme..
¿Soy la única cristiana a la que le pasa?
No, la biblia me dice claramente:
" El problema está en mí, porque soy demasiado humano, un esclavo del pecado. Realmente no me entiendo a mí mismo, porque quiero hacer lo que es correcto pero no lo hago. En cambio, hago lo que odio." Romanos 7:14b-15 NTV
Pero el antídoto a nuestro egoísmo, de cuidarme yo y solo yo, es lo que Jesús dijo en Juan :
"Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy.. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.
Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis." Juan 13:13-15
Servir. Ocuparme a favor de otros. Rendirme al Espiritu Santo que me dará un gozo nuevo en para tomar tiempo y entrenar a otros en lo que Dios ha revelado en Su palabra.
Ser paciente. He sido hueso duro de roer. Necia. Y el Señor ha sido paciente, increíblemente paciente conmigo y ha ido derribando murallas de mi vida y quebrando mi vida hasta hacerla nueva.
Hacerlo en misericordia. No como obligación, ni con cara de suplicio universal. No. Usar esa misericordia que he recibido, y que el Espiritu la multiplique a favor de otros.
Y escribirlo es fácil. Leerlo, también. Pero hacerlo no es sencillo. Es un morir diario que desafía mi autodefensa, mis derechos y mi comodidad. Pero como sé que tengo Intercersor Perfecto junto al Padre. Jesús ruega por mí, como rogó por Pedro:
"pero yo he rogado por ti para que tu fe no falle; y tú, una vez que hayas regresado, fortalece a tus hermanos".
Esa es nuestra chamba .Fortalecer a los hermanos. Esperar a los lentos. Alegrar a los tristes. Enderezar a los caídos. Exhortar a los extraviados. Iluminar los perdidos.
Todo, en el nombre de Cristo Jesús. Él espero largo tiempo por mí.. ¿quién soy yo para no hacerlo por otros?

No hay comentarios:

Publicar un comentario